Agosto, agosto...

No es un resumen de mi mes, sino una entrada que pretendía realizar desde el día 2 del presente y hasta hoy no había podido hacerlo; esto no es debido a que haya tenido muchas actividades por realizar (porque, de hecho, estoy de vacaciones), sino a que éste mes ha pasado… y no.

Lo he sentido a medias. Pasa rápido y, que me di cuenta, estamos a 11 y yo aún me siento como que estoy a los primeros del mes, que fue cuando tuve dos noticias lindas. La primera, fue sobre Ambrosía: ¡llegó a los 7000000 (siete millones) de lecturas!


Para ser sincera, nunca esperé que llegara a tantas lecturas. Ambrosía es muy especial para mí (tal vez porque llevo más de una década escribiéndola o quizá porque le he puesto el corazón entero en cada letra) y cada logro, cada comentario e incluso voto, me pone feliz.

La otra noticia (de la cual me enteré el mismo día que lo de Ambrosía) es sobre El hombre de arcilla; mi pequeña bebé (mi bello inicio de la Serie Orígenes) está en los destacados de Agosto en Novela Juvenil en Español, en Wattpad, lo cual me pone muy, muy contenta.





De manera personal (lo contaré porque estoy muy feliz por ello) encontré una tienda de artículos japoneses y… ¡estoy súper emocionada! Creo que comparto (un poco) con Jessica Petrelli mi afición por algunos atractivos de Japón (y es que, ¿quién más tiene cositas tan cute, como ellos?)


Casi no me creo que encontré la tienda mientras buscaba una Barbie (hahaha). Aunque ése es otro tema del que me gustaría hablar luego: vivo en un país latino (quizá el mayor representante de los países centro y sudamericanos) y… por más que busqué a Teresa, la Barbie de origen latino (que es la que yo quiero) no la encontré por ningún lado; había sólo muñecas rubias. Qué curioso, ¿no?